¿Cómo ser un auditor de cuentas en Madrid?

Los auditores contables son profesionales encargados de verificar y adjudicar que los libros contables de una empresa o institución sean confiables y auténticos, libres de fraude o inconsistencias. Por tanto, se trata de una visión general básica para avalar la transparencia de la compañía y valorar cualquier posible estafa en sus cuentas. Para ello un abogado especialista en mercantil le podría asesorar sobre ello.

La mayoría de las empresas no suelen tener una auditoría interna, sino que contratan auditores externos para llevar a cabo el proceso. Además, puede actuar como asesor financiero, es decir, en otras palabras, diseña estrategias para evitar el riesgo económico, reducir costos y, en última instancia, maximizar la productividad.

Condiciones para poder ser un auditor de cuentas

Para convertirse en auditor, debe tener un título universitario en administración y dirección de empresas, negocios o economía. También puede recibir formación técnica avanzada en administración y finanzas.

Después de completar esta facultad, debe registrarse en el ROAC del Instituto de Contadores y Auditores (ICAC), tener la nacionalidad española o la nacionalidad de uno de los estados miembros de la UE, no tener antecedentes penales y haber obtenido un título universitario oficial o tener un título de estudios o profesional que autorice el acceso a la universidad.

Los conocimientos teóricos básicos para poder ejercer la profesión se adquieren a través de cursos específicos impartidos. Acreditar al menos 3 años de formación práctica, u 8 años si el candidato no dispone de un título universitario oficial. Y, aprobar los exámenes de competencia profesional organizados y reconocidos por el Ministerio de Asuntos Económicos, incluidos los exámenes teóricos y los exámenes prácticos.

Además, hay cursos de estudios para planificar el examen ICAC o algunos cursos de maestría que preparan a los participantes para convertirse en auditores de cuentas, convalidando el examen teórico de acceso a la profesión (ROAC).

¿Qué salidas profesionales tiene un auditor de cuentas?

Los auditores de cuentas profesionales están ampliamente requeridos para realizar auditorías externas e internas. Tendrá una sólida reputación por realizar la gestión financiera y los controles de gestión. Además, la auditoría ya no es dominio exclusivo de las grandes empresas, y las pequeñas y medianas empresas tienen una creciente demanda de servicios de auditoría, lo que les obliga a actuar como consultores.

¿Cuáles son las principales funciones de un auditor de cuentas?

Las funciones principales de un auditor de cuentas son:

• Deberá detectar fallas que causen ineficiencias en los sistemas financieros de su empresa e intentar mejorar sus operaciones.
• Optimizar las actividades y la productividad de la empresa auditada.
• Desarrollar políticas internas, procedimientos y protocolos dentro de las normas y legalidades vigentes en el país.
• Supervisar que el personal de la compañía implemente y haga cumplir estas políticas, procedimientos y protocolos.
• Presente objetivamente su visión a los gerentes de la empresa y buscar soluciones alternativas.

¿Cómo ser un buen auditor de cuentas?

En términos de ética profesional, los principios básicos para ser un buen auditor son:

• Integridad: Los auditores deben actuar con integridad y honradez en todo el trato profesional.
• Objetividad: los profesionales no deben permitir el favoritismo, los conflictos de interés o la influencia indebida de otros.
• Competencia profesional y diligencia debida: Los auditores son responsables de mantener el conocimiento y las habilidades profesionales al nivel requerido para garantizar que los clientes reciban servicios profesionales competentes.
• Confidencialidad: Los profesionales respetarán la privacidad de la información obtenida como resultado de relaciones profesionales y comerciales y no divulgarán dicha información a terceros sin la debida y específica autorización.
• Comportamiento profesional: los profesionales deben cumplir con las leyes y regulaciones pertinentes y deben evitar cualquier comportamiento que dañe la reputación profesional.

Y es que, un buen auditor debe tener un carácter diplomático, ser paciente, comunicativo, crítico, disciplinado, imparcial, trabajador, de mente abierta, honesto, analítico, curioso, interesado, resiliente, profesional y bien capacitado. Actualmente, el rol del auditor debe brindar un valor agregado además de cumplir con lo anterior. Los auditores no sólo deben enfocarse en el pasado de la empresa, también deben brindar una visión diferente para el futuro.

Una vez que los estados financieros han sido revisados para presentar una imagen fiel de los activos y la posición financiera en todos los aspectos materiales, el auditor debe poder brindarle al cliente una evaluación de la integración de las soluciones orientadas al negocio y los sistemas de control interno.

Tipos de auditorías

1. Auditoría interna: Es elaborada por una persona o un grupo de personas que trabaja en la empresa. La idea es que las organizaciones deben examinarse a sí mismas para encontrar áreas en las que puedan mejorar.
2. Auditoría Externa: Auditoría realizada por un agente ajeno a la empresa evaluada. Entonces, por lo general, una firma de auditoría externa audita los procesos de otra empresa que ha celebrado un contrato de servicios. Este tipo de auditoría busca una perspectiva externa, un análisis de un tercero fuera de la empresa comercial.
3. Auditoría financiera: Esto implica revisar los estados financieros de la empresa para garantizar que reflejen la posición financiera de la institución.
4. Auditoría de Desempeño: Es una auditoría diseñada para determinar si una empresa está haciendo un uso adecuado de sus recursos. Es decir, su proceso es eficiente y no le cuesta a la empresa.
5. Auditoría financiera: Incluye un análisis de las condiciones financieras y contables de la empresa. Va más allá de la contabilidad y la auditoría. Sus tareas deben ser realizadas en relación con la fiscalidad, la gobernanza, la informática y la auditoría fiscal.
6. Auditoría ambiental: consiste en medir el impacto ambiental de las operaciones de una empresa. Esto es para determinar el cumplimiento de las normas legales. Si este no es el caso, se deben considerar mejoras o estrategias.
7. Auditoría informática: esta es una auditoría que evalúa el software o los sistemas informáticos utilizados por una empresa, como para procesos comerciales o financieros.
8. Auditoría de calidad: utilizada para comprobar el correcto funcionamiento del sistema de calidad implantado por la empresa. Está dentro del alcance de la norma ISO 9001.
9. Auditoría de Cumplimiento: Una auditoría que verifica que una empresa está siguiendo buenas prácticas en una industria o entorno definido legalmente, cumpliendo así con los estándares.
10. Auditoría de Gestión: Consiste en evaluar el uso de los recursos de la empresa para evaluar si es efectivo y, a diferencia de la auditoría operativa, va un paso más allá al analizar si se están alcanzando los objetivos de rentabilidad deseados.