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¿Es posible solicitar la incapacidad permanente estando en el paro? Sin duda, esta es una pregunta que se realizan muchos españoles. La razón es que el problema de salud que dé lugar a esa situación puede sobrevenir aunque el sujeto no esté dado de alta como trabajador en la Seguridad Social en ese momento. Aquí vamos a tratar de resolver todas las posibles preguntas que alberguen al respecto nuestros lectores. En caso de requerir información más al detalle, se recomienda acudir a un abogado laboralista que sabrá tratar y proteger sus derechos.
Pero ¿qué es una incapacidad permanente?
La incapacidad permanente se define como la situación por la cual un sujeto no puede seguir trabajando (o, al menos, no a pleno rendimiento) a causa de una patología o lesión que le limita física y/o psicológicamente. Puede hacer referencia a una actividad en exclusiva o a cualquiera. De estas cuestiones depende el grado al que se puede aspirar:
- Incapacidad permanente parcial. El grado más bajo. El requisito es el reconocimiento de un grado de incapacidad superior al 33 %. Esto supone que el trabajador puede seguir trabajando, pero con dificultad. No conlleva el pago de pensión, aunque sí de una indemnización mediante un solo pago
- Incapacidad permanente total. En este caso, la incapacidad del trabajador le invalida para seguir desarrollando su profesión, pero no otra distinta. Conlleva una pensión del 55 % de la base reguladora (75 % a partir de los 55 años).
- Incapacidad permanente absoluta. Las personas a las que se les reconoce esta situación no pueden realizar ningún trabajo. Su pensión es del 100 % de la base reguladora.
¿Se puede pedir una incapacidad sin estar trabajando?
Obviamente, la respuesta es que sí. Solo hay que reflexionar acerca del siguiente ejemplo. Imaginemos a una persona que ha sido recientemente despedida y se encuentra buscando empleo. Un día, acudiendo a una entrevista de trabajo, sufre un accidente de tráfico cuyas secuelas le impiden volver a desarrollar su oficio. Sería a todas luces injusto que no pudiese recibir una pensión que garantizase su bienestar económico.
Ahora bien, para solicitar la incapacidad permanente como desempleado, es necesario cumplir con algunos requisitos. El más importante de ellos es estar en una situación asimilada al alta.
La incapacidad permanente estando en el paro
Es el supuesto más habitual. Un trabajador se encuentra en desempleo contributivo (no importa si cobrando un subsidio o no) y quiere solicitar la incapacidad permanente para continuar en su oficio o con carácter general.
Esta situación se considera asimilada al alta y, por tanto, faculta al trabajador a realizar la solicitud sin ningún problema. El único requisito es sellar el paro si se está cobrando la prestación o renovar la solicitud de demanda de empleo en el SEPE. Si no es así, el INSS puede que no reconozca la situación.
La incapacidad permanente en situación de no alta
Hay personas que no trabajan, no se encuentran de baja médica y no están en situación asimilada al alta por no estar inscritos como demandantes de empleo en el SEPE. En este tipo de casos, también es posible acceder a una prestación de incapacidad del INSS. Sin embargo, es necesario cumplir todos estos requisitos:
- Obtener un grado de incapacidad permanente absoluta o gran invalidez. Este último caso hace referencia a las incapacidades permanentes absolutas que, además, obligan al afectado a ser ayudado por terceros para desarrollar sus tareas personales básicas, lo que conlleva el pago de un suplemento más allá del 100 % de la base reguladora.
- Haber cotizado, como mínimo, 15 años.
- De esos 15 años, 3 de ellos han de situarse dentro de los últimos 10 años.
¿Cómo pedir una incapacidad laboral?
El primer paso consiste en descargar el modelo de solicitud de incapacidad permanente en la página web de la Seguridad Social. Después, hay que rellenar el documento y adjuntar todos los informes médicos que se posean.
A continuación, hay que presentar esa solicitud en un Centro de Atención e Información del INSS. Una rápida búsqueda en Google puede permitirle saber al interesado cuál es el más cercano a su domicilio. Eso sí, es importante pedir cita previa por adelantado. Después, llega el turno del tribunal médico.
Pero, una vez que la solicitud llega al tribunal médico ¿cuándo te llaman? No es posible dar un plazo fijo. Sin embargo, según la ley, no pueden transcurrir más de 135 días naturales entre la fecha de solicitud y la cita. Si esta no se produce, se puede dar por desestimada por silencio administrativo, ante lo cual solo cabría interponer los pertinentes recursos.
Preguntas frecuentes sobre la solicitud de incapacidad permanente estando en el paro
¿Si me conceden incapacidad permanente tengo derecho a paro?
Sí, pero únicamente si se ha obtenido el derecho a cobrar el paro de un empleo compatible con la situación de incapacidad permanente. Esto es especialmente habitual entre las personas que tienen reconocida una incapacidad permanente total y consiguen un trabajo en un oficio distinto al que tenían antes de adquirir ese reconocimiento.
¿Se puede cobrar una paga por depresión?
Sí. Las enfermedades mentales son tan incapacitantes como las físicas, y la depresión tiene esta consideración.
¿Puedo estar de baja médica sin estar trabajando?
Sí. Solo hay que pensar en un trabajador que, estando de baja, ve terminada la duración de su contrato temporal sin que el empresario le renueve. En ese caso, la incapacidad no cesa por el mero hecho de ya no tenga un vínculo laboral con su empleador.
¿Suelen quitar una incapacidad permanente total?
Generalmente, tras la concesión de la situación de incapacidad permanente, el INSS fija un plazo de revisión para determinar si el trabajador ha mejorado o no. No es habitual que revoque su decisión inicial, pero puede pasar. Eso sí, en caso de que el sujeto afectado vuelva a desempeñar una actividad profesional relacionado con el oficio para el que está incapacitado, la Seguridad Social revocará la pensión inmediatamente e, incluso, puede interponer una sanción.
Conclusiones
En definitiva, solicitar la incapacidad permanente estando en paro es totalmente posible. Solo hace falta cumplir con los requisitos necesarios. Esperamos haber ayudado a nuestros lectores a comprender cuáles son.
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