Demanda por incumplimiento de contrato. Reclamación de daños y perjuicios

Cuando dos personas o empresas, así como una empresa y una persona, firman un contrato, ambas se comprometen a cumplir lo que viene especificado en él. Es decir, el Derecho Civil establece que están obligadas a hacerlo.

El problema está en que, en muchas ocasiones, una de las partes no lo hace. Esto es lo que se conoce como incumplimiento de contrato y da derecho al perjudicado a resolverlo y a solicitar una indemnización por daños y perjuicios.

El incumplimiento de contrato

Como ya hemos dicho, la ley establece la obligación mutua de cumplimiento entre las partes cuando se firma un contrato con validez jurídica. No hacerlo está castigado según lo previsto en el artículo 1124 del Código Civil.

Este artículo clave dentro del texto más importante de nuestro Derecho Civil establece dos formas de actuar por parte del agraviado. La primera de ellas consiste en exigir judicialmente el cumplimiento de las cláusulas previstas en el contrato. La otra consiste en la reclamación de daños y perjuicios por incumplimiento contractual y su posterior resolución.

Requisitos para que se produzca un incumplimiento de contrato

Ahora bien, antes de presentar una demanda por incumplimiento de contrato, es necesario que se cumplan una serie de requisitos. Vamos a verlos:

• El vínculo contractual entre ambas partes ha de estar vigente, por lo que no se puede solicitar una indemnización por incumplimiento de contrato si este ha sido declarado nulo previamente o ya se ha extinguido.
• El contrato debe ser recíproco, es decir, involucrar a dos partes. Los contratos unilaterales, como son los de donaciones, no aplican por esta vía.
• La parte perjudicada tiene que haber cumplido con sus obligaciones.
• Las obligaciones reclamadas tienen que ser exigibles, lo que implica que ya se haya superado el plazo para su realización.
• El incumplimiento ha de haberse producido de forma deliberada.

Este último punto es muy importante, ya que implica que la parte que incumple lo hace a sabiendas. En este sentido, existen tres alternativas:

• Dolo. Para que se produzca es necesario que la parte que incumple lo haga de manera premeditada.
• Negligencia o culpa. El caso supuesto al anterior. Es decir, el incumplimiento se ha llevado a cabo sin que exista premeditación.
• Responsabilidad objetivo. La parte que incumple no ha incurrido en negligencia o dolo, pero es responsable del incumplimiento.

Cómo reclamar los daños y perjuicios por incumplimiento de contrato

Es habitual pensar que la única forma de exigir el cumplimiento del contrato o de reclamar los daños y perjuicios es la judicial. Sin embargo, no es así. Lo más frecuente es tratar de llegar a un acuerdo extrajudicial, ya que los plazos y los gastos se reducen de forma notable.

En caso de que no sea posible llegar a un acuerdo, tampoco es raro recurrir a la vía de la mediación, es decir, poner el caso en manos de un tercero que se ocupe de resolver el conflicto. Si no funciona, ya solo quedará la vía judicial. Contar con un abogado especializado en la materia se antoja fundamental para defender nuestros intereses.

Ejemplos de incumplimiento de contrato

Los incumplimientos de contrato pueden darse de muchas formas diferentes y en una gran variedad de ámbitos. Sin embargo, estos son los más habituales.

Contratos de alquiler

Sería el caso, por ejemplo, de un arrendatario que no cumple con el pago de sus cuotas o que ocasiona daños que no se pueden compensar únicamente mediante la fianza pagada durante la firma del alquiler. Asimismo, también lo sería de un arrendador que no hace frente a sus obligaciones, como respetar la duración prevista en el contrato o no realizar el debido mantenimiento sobre la vivienda.

Contratos laborales

Los contratos laborales por cuenta ajena son los ejemplos más evidentes. Solo tenemos que pensar en una empresa que decide despedir unilateralmente a un trabajador y que, para ello, tiene que abonarle una determinada indemnización.

Sin embargo, la vía laboral tiene una serie de peculiaridades muy específicas, por lo que en este artículo encajarían mejor los incumplimientos contractuales entre autónomos y profesionales independientes que prestan sus servicios a usuarios particulares u otras empresas.

Contratos de prestación de servicios

Por su parte, también es habitual el caso de un sujeto particular que contrata a una empresa para llevar a cabo un determinado servicio, como por ejemplo una reparación en el hogar. Si no ejecuta el trabajo en tiempo y forma, es perfectamente posible denunciar a una empresa por daños y perjuicios.

Eso sí, del mismo modo, la empresa puede reclamar el cumplimiento del contrato si el usuario no le abona sus correspondientes honorarios, a los cuales habrá que agregar los intereses de demora.

En definitiva, los incumplimientos de contrato pueden darse por muchas razones y de varias maneras diferentes, ya que cada uno de ellos tiene sus propias peculiaridades. Eso sí, en todos los casos, la parte perjudicada tiene la posibilidad de reclamar que se cumplan sus cláusulas o de, en su defecto, recibir una indemnización por daños y perjuicios que le sirva de compensación. Contacta con un abogado experto en derecho civil de nuestro bufete si te encuentras en una situación parecida a las que se muestran en este artículo.